En una larguísima (casi dos horas) e interesantísma conversación, el CEO de Google Sundar Pichai repasó con el popular podcaster e investigador en IA Lex Fridman su visión del mundo, la tecnología y el liderazgo. El diálogo revela a un directivo reflexivo, alejado del estereotipo de CEO agresivo, y profundamente comprometido con el impacto que tiene la tecnología sobre la humanidad. Además, deja conclusiones muy llamativas sobre su visión de un mundo que está cambiando de forma radical a través de la IA.

Ya que Fridman nos ha hecho el favor de publicar la transcripción de la entrevista (gracias!) hemos aprovechado para repasarla en profundidad y extraer lo más relevante para nuestro sector. Vamos allá 😉

Un líder tranquilo en tiempos turbulentos

Pichai arranca definiendo su estilo de liderazgo: escucha más de lo que habla, busca comprender antes de imponer, y valora el aprendizaje continuo como motor de crecimiento. “Ser un buen oyente es una parte importante del liderazgo”, explicó. En un entorno como Google, donde miles de personas trabajan en proyectos profundamente complejos, su papel no es tener siempre las respuestas, sino formular las preguntas correctas.

El CEO confiesa que muchas decisiones importantes requieren paciencia, y que su proceso habitual consiste en absorber la mayor cantidad de información posible antes de decidir. Esa filosofía de gestión, basada en la humildad intelectual, también se refleja en su visión sobre la IA.

Preguntado por su célebre tranquilidad y equilibrio a la hora de dirigir, Pichai da rienda suelta a su parte más humana: 

«Me enfado. Me frustro. Siento las mismas emociones que todos en el trabajo y en todo. Pero con el tiempo, descubrí la mejor manera de sacar el máximo provecho de las personas. Encuentras personas con una misión clara, que comparten el mismo camino, que tienen un impulso interior hacia la excelencia para dar lo mejor de sí. Motivas a la gente y puedes lograr mucho de esa manera. Suele funcionar así.

¿Pero he perdido la cabeza en ocasiones? Sí. Quizás con menos frecuencia que otros, y quizás con los años cada vez menos, porque he descubierto que no es necesario para lograr lo que uno necesita».

La IA como revolución más allá de la tecnología

Pocas frases resumen mejor el pensamiento de Sundar Pichai que esta: “La inteligencia artificial es la tecnología más profunda en la que está trabajando la humanidad. Siempre he dicho que es más profunda que el fuego o la electricidad”. Lejos de una metáfora efectista, lo que plantea es un cambio radical que marcará un antes y un después en la historia de la humanidad.

Según explica, la IA no solo permite automatizar tareas o generar texto, sino que tiene la capacidad de aprender a aprender, algo que la distingue de cualquier innovación anterior. “Lo que me sorprende es cómo mejora por sí misma. Eso introduce una dinámica completamente nueva”, señala.

Pichai reconoce que aún estamos en los primeros pasos de esta transformación, pero sostiene que su impacto será transversal: desde la forma en que las personas interactúan con el conocimiento hasta cómo se estructura la economía global. Y es ahí donde el sector digital ya está viendo los primeros temblores.

«En Google alrededor del 30% del código utiliza sugerencias generadas por IA. Pero la métrica más importante, y la medimos cuidadosamente, es cuánto ha aumentado la velocidad de ingeniería gracias a la IA. Es una medición difícil, y la tratamos rigurosamente. En toda la empresa, hemos logrado un aumento del 10 % en la velocidad de ingeniería mediante IA, pero planeamos contratar más ingenieros el próximo año, porque el margen de oportunidades de lo que podemos hacer también se está expandiendo.»

¿Hacia la IA General?

En la entrevista, Sundar Pichai aborda el debate sobre la AGI (Inteligencia Artificial General) con cautela pero sin restar importancia al progreso. Aunque no cree que lleguemos a la AGI en 2030, anticipa avances «dramáticos» que transformarán profundamente la sociedad. Incluso llega a introducir el concepto de AJI (Artificial Jagged Intelligence), una fase actual en la que la IA impresiona con sus capacidades pero aún falla en tareas triviales.

«Hoy en día hay momentos como cuando uno está sentado en un Waymo (un taxi autónomo) en una calle de San Francisco, entre la multitud y la gente, y se abre paso; veo destellos de ello. El coche a veces se muestra impaciente, intentando abrirse paso en Gemini Live o haciendo preguntas sobre el mundo».

Para Pichai, más que fijarse en una fecha concreta, lo esencial es prepararse para las profundas implicaciones de esta evolución tecnológica que, sin duda, marcará la próxima década en múltiples dimensiones.

Cómo la IA está redefiniendo la experiencia de buscar online

Uno de los temas más relevantes de la entrevista es el cambio de paradigma en la forma en que usamos herramientas como el buscador de Google. Pichai introduce el concepto de AI Overviews, la funcionalidad con la que Google está impulsando la Search Generative Experience (SGE). Para Pichai esta nueva experiencia no elimina la clásica lista de enlaces, pero sí la recontextualiza: por encima aparece un resumen creado por IA que ayuda al usuario a entender rápidamente la información más relevante sobre su búsqueda.

Explicó que la evolución de la Búsqueda es constante. El objetivo de diseño es que los usuarios obtengan «mucho contexto» pero también «encuentren muchas cosas en la web«. Esto se mantendrá en el recién anunciado modo IA y en las overviews de IA.

¿Está Google planteándose un “modo IA” permanente? Aunque Pichai no usa ese término, sí admite que en el futuro habrá contextos en los que los usuarios prefieran interactuar con agentes conversacionales de forma más sostenida: “Creo que habrá experiencias en las que la gente interactúe con una IA de forma prolongada. Pero también creo que otras veces preferirán simplemente una búsqueda tradicional”.

Es decir, para Pichai no caminamos hacia un entorno en el que la IA sustituya a la experiencia digital tradicional, sino que la complemente y la amplíe.

Respecto a la publicidad, Pichai indicó que en la etapa inicial del modo IA se centrarán en la «experiencia orgánica» y sugirió que la IA ayudará a determinar la mejor manera de integrar anuncios, quizás explicando la información comercial de una nueva manera. Reconoció que la necesidad subyacente de que la gente valore la información comercial y las empresas se conecten con los usuarios no cambia con la llegada de la IA pero están abiertos a repensar su encaje.

Sobre si el modo IA reemplazará a los clásicos 10 enlaces azules más la incorporación de la IA Overview , Pichai respondió que el plan actual es que el modo IA sea una «pestaña separada para las personas que realmente quieren experimentar eso». Afirmó que, a medida que las características funcionen, las «seguirán migrando a la página principal». Es decir, con el tiempo, a medida que Google perfeccione las funcionalidades del modo IA y vea cuáles son exitosas y útiles para los usuarios, esas características probadas y pulidas podrían incorporarse a la experiencia de búsqueda principal (la página que vemos normalmente al buscar).

A pesar de toda la IA, Pichai asegura que un objetivo fundamental de Google es que la IA siga dirigiendo a los usuarios a la información y el contenido que ha sido creado por personas en la web. Esto es crucial para apoyar a los creadores de contenido y evitar que la IA se convierta en una «caja negra» que solo genera sus propias respuestas sin referencia a las fuentes originales.

Pichai también abordó las preocupaciones de los creadores de contenido, afirmando que ayuda a «entregar referencias de mayor calidad» donde la gente tiene «mucha más probabilidad de encontrar lo que busca». Indicó que la gente está «explorando», «curiosa» y su intención se satisface «más». Concluyó diciendo que «las noticias y el periodismo desempeñarán un papel importante en el futuro» y que Google está «bastante comprometido con ello»

Hacia una web agéntica

Pichai explica que cree que en el futuro convivirán dos webs distintas: la tradicional o humana y la agéntica, donde los agentes IA tendrán el mayor protagonismo y se encargarán de resolver tareas para los humanos:

«Hoy en día, no todo el mundo lo hace, pero vas a una gran tienda, te encanta recorrer los pasillos, te encanta ir de compras o al supermercado, elegir la comida, etc., pero también compras en línea y te hacen entregas a domicilio, ¿verdad? Así que ambas cosas son complementarias, y eso aplica a los restaurantes, etc. Así que creo que, con el tiempo, los sitios web también mejorarán para los humanos. Tendrán un mejor diseño. La IA podría, de hecho, diseñarlos mejor para los humanos.

Así que espero que la web se vuelva mucho más rica, más interesante y más fácil de usar. Al mismo tiempo, creo que habrá una web agéntica, que también está progresando mucho, y hay que resolver el valor comercial y los incentivos para que funcione bien, ¿verdad? Para que la gente participe en ella.

Pero creo que ambas coexistirán, y obviamente, los agentes pueden no necesitar lo mismo… No puede ser. No necesitarán el mismo diseño ni los mismos paradigmas de interfaz de usuario que los humanos necesitan para interactuar. Pero creo que ambos estarán allí».

Riesgos, ética y el desafío de la gobernanza

En paralelo al entusiasmo, Pichai no ignora los riesgos. Habla abiertamente del desafío que representa desarrollar esta tecnología de forma ética, desde los sesgos hasta la desinformación, pasando por el posible impacto en el empleo. “Tenemos que asegurarnos de que la IA se desarrolle de forma responsable. Por eso establecimos nuestros Principios de IA en Google”, señala.

La solución, dice, no puede dejarse solo en manos de las empresas tecnológicas: “Los riesgos son demasiado altos para que esto lo resuelvan únicamente las compañías. Necesitamos instituciones fuertes, cooperación global y un compromiso real con hacer lo correcto”.

Democratizar la IA: una responsabilidad histórica

Pichai también insiste en la necesidad de evitar que la IA amplíe las desigualdades existentes. Recuerda su infancia en Chennai, India, y cómo tuvo su primer teléfono a los 14 años. Esa experiencia marcó su visión sobre la tecnología como motor de inclusión:  “La tecnología es un gran igualador. Tiene el poder de dar acceso a oportunidades a cualquier persona”.

Por ello, uno de los grandes esfuerzos de Google es adaptar sus modelos de IA a contextos de bajo acceso tecnológico, traducir contenido a lenguas menos representadas y desarrollar herramientas que funcionen incluso con recursos limitados.

IA y productividad: una nueva revolución del conocimiento

En el plano económico, Pichai es claro: la IA transformará el trabajo del conocimiento. “La IA puede ayudarte a empezar, a editar, a pensar más rápido. Puede liberar tiempo para que te concentres en lo que realmente importa”. En lugar de reemplazar humanos, cree que los sistemas inteligentes funcionarán como copilotos, aumentando la eficiencia y redefiniendo qué tareas aportan valor.

Esto afectará a diseñadores, programadores, analistas y creativos, y abrirá nuevas posibilidades para el desarrollo de software y contenido, a una escala y velocidad sin precedentes.

El futuro, entre el asombro y la responsabilidad

Al final de la conversación, Lex Fridman pregunta si la tecnología puede alejarnos de lo humano. Sundar Pichai responde con optimismo, en una respuesta que resume toda su filosofía:

«Soy optimista y, si consideramos el recorrido de la civilización humana, vemos que hemos mejorado el mundo incansablemente en muchos sentidos. En cualquier momento, existen grandes problemas que resolver, pero siempre me pregunto: ¿habrías nacido ahora o en cualquier otro momento del pasado? Casi siempre preferiría haber nacido ahora. Y ese es el logro extraordinario de la civilización humana: constantemente hemos hecho del mundo un lugar mejor. Y algo me dice que, como humanidad, siempre nos alzamos juntos para impulsar esa frontera. Así que espero que no sea diferente en el futuro»

Imagen: ChatGPT

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